La segunda parte del abecedario. El quién y cómo de la música del 2012. De la “N” a la “Z”. No están todos los que son, pero si son todos los que estan. O algo así. Bueno, después de tantas obviedades y frases hechas, vamos al turrón:
Numbers
El sello de Glasgow se ha hecho un merecidísimo hueco en el panorama internacional de la música de club a base de electro-funk, techno, sonidos rave y dosis de dubstep. “Guarreridas” varias que han hecho las delicias de los clubbers con paladar. Jackmaster, Lory D, Jamie XX, Roska, Untold, Deadboy, Mosca… son algunos nombres de su nómina de productores que con sus maxis de colorines han refrescado las pistas de baile mas exigentes. El pasado Sónar tuvieron showcase propio, y este año repiten en el Primavera Sound, así que este 2012 también podrás disfrutar de su sonido “so fresh and so clean”.
Old School House
David Guetta y sus secuaces pusieron de moda el año pasado el “electro house” para el gran público. El francés escuchaba en privado los discos de sus compatriotas de Ed Banger, y luego transformaba esos sonidos de sintetizadores martilleantes y groovies en algo de digestión fácil para la peña ibicenca. Pero un sector del público, harto de tanto sin-sentido, requería un “back to roots” de la música disco-house para poder volver a la pista de baile en plan “Studio 54” y no en modo poligonero. Los trabajos de “Hercules & Love Affair” y “Azari & III” han sido agua de mayo para dichas demandas. Ha vuelto el “house” hecho a la antigua, el de Chicago, revisitado en plan “disco”, con bases más melódicas, menos cargantes, con arreglos vocales en lugar de samplers de auto-tune, con lineas de bajo a lo Adonis y teclados ochenteros. Solo hay que darle una escucha a “My House” de Hercules, o a “Reckless with your love” de Azari & III para ver que vuelve el petardeo con clase. Algunos maxis del sello Permanent Vacation y el retorno de Virgo confirman la tendencia del “new old school disco-house”.
Pj Harvey
Año que se digna a publicar material, año que es noticia. En “Let England Shake” nos destiló una radiografía emocional de sus orígenes y raíces; un paso adelante que la aleja todavía mas de aquella Polly Jean en plan dominatrix que desgarraba “This is love” solo con una guitarra. Mucho mas folkie y élfica, Pj Harvey sigue siendo única, ya sea con una Fender Telecaster o con una arpa, y cada vez que publica disco hay que poner la oreja si o si, por devoción mariana o por imperativo legal.
Quién
no estuvo se lo perdió. Noche de “Jamies” o “Triple J” o como prefieran, pero el día que James Blake, Jamie XX y Jamie Woon pisaron el Razzmatazz va a ser una de esas fechas difíciles de olvidar. A James Blake hay que darle de comer a parte. Lo suyo ya es incatalogable. Con solo un teclado y acompañamiento de guitarra y batería puede desgranar un sinfín de temas, a cada cual con mas brillo, tocando todos los palos habidos y por haber en esto de la música contemporánea: rozando el house bailable en “CMYK”, en plan cantautor “digi-soul-step” en temas como “Wilhelm Scream” o “Limit to your love”, a lo free-jazz en “Love what happened here”… Tanto te llegaba al alma, como te hacía mover los pies, como ponía a vibrar las estanterías de botellas del Razz con subgraves infernales. Lo de catalogarlo como “post-dubstep” ya suena prehistórico. De hecho, una de las pocas concesiones al género que hizo fue en los bises, versionando el “Anti-War Dub” de Digital Mystikz. Y si en directo es bueno, a los platos su gusto por el two-step, dubstep y bass music de diverso pelaje es de gourmet, de “finolis” melómano, “exquisito”. Jamie XX cerró la velada y tampoco se quedó corto… Y lo de comparar a James Blake con Antony (and the Johnsons)… al próximo que se atreva me lo cargo.
Rihanna
El 2011 ha sido un gran año para la de Barbados. Ha publicado “Talk that talk”, ha colaborado con Drake, ha firmado hitazos con Calvin Harris, ha hecho de partenaire de Kanye West, ha jugado a ser diva discotequera con David Guetta, a poner gorgoritos para Coldplay… no para. Su “Loud Tour” visitó Barcelona y convirtió el Sant Jordi en una sauna hedonista con su listado de hits y sus autoexploraciones en bikini. Y mientras suena “Only girl (in the World)”, en plan Kate Ryan versionando éxitos de Rocío Jurado, solo podemos añadir una cosa… R.E.S.P.E.C.T.
Steve Jobs
Nuestra vida no hubiese sido igual sin Jobs. Un héroe moderno, gurú del ocio digital, que llevó el alto diseño tecnológico a las masas. Su influencia abarcó muchos campos: la informática pura y dura, las herramientas para diseñadores gráficos, la revolución de la telefonía móvil, las descargas de contenidos culturales, el libro electrónico, las películas de animación… Y también el mundo de la música. Hoy en día la estampa del dj de techno escondido detrás de un portátil de la manzanita es algo ya habitual. Deejays como Richie Hawtin o software como Ableton utilizaron las posibilidades que ofrecía el hardware de Jobs para crear. Jobs ha alcanzado el status de pop-star, algo que solo estaba reservado para las estrellas de la música y del cine, y su influencia y enseñanzas ya son una inspiración para una generación de jóvenes que han crecido con la tecnología y el diseño. Su biografía, la biblia. Su credo, «think different».
Tri-Angle
El 2010 fue el año de la aparición pública de este sello americano con los debuts de oOoOO (que entrevistamos en Rocket Magazine con motivo del Sónar) y Balam Acab. Pero el 2011 ha sido el año de su consolidación definitiva. El que parecía ser un sello que aparecía a rebufo de la moda del “witch house” ha cogido personalidad propia y un sonido difícil de clasificar pero que teje un hilo argumental entre todos sus artistas. Todo el material publicado este año por Tri-Angle ha sido prácticamente impecable y ha supuesto el punto de partida de una estética sonora a explorar este próximo 2012. Clams Casino, How To Dress Well, Holy Other, Fatima Al Qadiri… música para dejarse llevar por los misterios de la psique.
Ultrashow
Si, bueno, esta entrada no es exclusivamente de música, pero podemos decir como excusa que Miguel Noguera aparece en el nuevo videoclip de Mendetz. Pero esto no es lo que nos ocupa. “Ultrashow” es el espectáculo de humor de Miguel Noguera que cada viernes interpreta en el Teatre Alexandra. Bueno, lo de “interpretar” es por decir algo, porque Noguera se limita a vomitar una serie de locuras, ideas peregrinas, alucinaciones mentales y distorsiones de la realidad. Post-humor lo llaman, pero el nombre es lo de menos. Lo que importa es que estas una hora riéndote, con los ojos como platos y con el cerebro en K.O. técnico, que tal como están las cosas no es moco de pavo.
Vicki Leex
M.I.A. se despidió del 2010 con sabor agridulce. Su álbum MAYA no cuajó como se esperaba, y muchos añoraban ya la producción de Diplo. Así que decidió dar un golpe de autoridad y publicar un mixtape gratuito (“Vicki Leex”) con descartes de su último disco y otros temas inéditos, a modo de homenaje a Wikileaks, insignia entonces de la revolución global. Y menudas caras B… 36 minutos de producciones de Diplo, Switch y Rusko que supusieron la reconciliación definitiva con sus fans, y de paso posiblemente el mejor mixtape del 2011.
West
se alió este año con Jay-Z para publicar uno de los discos mas esperados del año, “Watch the throne”. El álbum suponía un choque de trenes de tótems del hip hop, posiblemente los Reyes Midas de la rima mainstream. Y aunque todo lo que tocan lo convierten en oro, y así parecía suponerlo la excelente portada del disco diseñada por Givenchy, la simbiosis de talentos no fue la esperada. Quizás porque dos personajes con el ego de la talla XXL solo pueden brillar con luz propia en solitario o al mando de la producción. Y aquí había dos patrones para un solo barco. Aún así el disco no está mal y nos deja joyas como “Otis”, que solo por el titulo ya pueden adivinar a quien samplean.
Xavier de Rosnay
y Gaspard Augé, alias Justice, eran uno de los retornos esperados este 2011. Y su vuelta a los ruedos dejó a muchos de sus fans con cara de compañero de Remedios Cervantes en «Atrapa un Millón». Algunos esperaban un disco de sonido «raver», agresividad clubber y hitazos pisteros, pero a los franceses les ha dado ahora por explorar las posibilidades del AOR y el Rock Progresivo en versión electrónica. “Audio, Vídeo, Disco” no está mal y gana con las escuchas, pero deja un poco frío cuando termina el minutaje. Vamos a ver como lo defienden en directo.
Yelle
Ha sido, sin comerlo ni beberlo, una de las sorpresas agradables del 2011. Yelle ha superado el examen del segundo disco con nota. Ha bajado las revoluciones de sus canciones y ha dado más protagonismo al «groove» en las bases. Lo que antes eran botes, gritos y brazos en alto, ahora es baile y movimientos sexys. En Rocket la entrevistamos y pudimos conocer de primera mano en que consistía su safari clubbing.
Zomby
«Dedication» ha sido uno de los mejores discos de música electrónica de este año. Zomby, uno de los primeras espadas de la escena dubstep de UK, se dió a conocer con aquel glorioso «Where were U in 92?» (2008) donde reinterpretaba los sonidos de la época «raver» de los 90 en clave dubstep. En «Dedication», en cambio, ha abierto su punto de mira hacia terrenos mas vaporosos y experimentales, cercanos a la IDM. Eso si, sigue tan paranoico como siempre: canciones de menos de dos minutos, inacabadas, como si se aburriera a medio proceso de producción, o quizás evitando dar primeras materias para las sesiones de deejays. Va por libre.
> Puedes leer la primera parte del Abecedario AQUI
> Puedes escuchar nuestra playlist con las mejores canciones del 2011 en este enlace: [>PLAY]
F: Azari & III / Rihanna
T: David Moreno
Rocket Magazine Barcelona
